Este fanático de Mascherano se tatuó al capitán de la selección Argentina para homenajearlo.
Un excelente tatuaje en blanco y negro de Javier Mascherano discutiendo con dos jugadores de la selección de Portugal, un momento que de hecho pasó en un partido donde el argentino se plantó a discutir sólo contra los dos portugueses, y esa escena del partido inspiró a este fan a hacerse este tattoo de Mascherano con la camiseta Argentina número 14, de espaldas, haciendo frente a los dos jugadores de Portugal.
Una excelente manera de homenajear a su ídolo, un tatuaje en blanco y negro en el torso del jugador de fútbol actualmente del Barcelona, Javier Mascherano.
Un excelente tatuaje en blanco y negro de Javier Mascherano discutiendo con dos jugadores de la selección de Portugal, un momento que de hecho pasó en un partido donde el argentino se plantó a discutir sólo contra los dos portugueses, y esa escena del partido inspiró a este fan a hacerse este tattoo de Mascherano con la camiseta Argentina número 14, de espaldas, haciendo frente a los dos jugadores de Portugal.
Una excelente manera de homenajear a su ídolo, un tatuaje en blanco y negro en el torso del jugador de fútbol actualmente del Barcelona, Javier Mascherano.
Tatuajes de Fútbol : Tatuaje de Mascherano
Javier Mascherano es un exfutbolista argentino que se destacó como un talentoso centrocampista defensivo y ocasionalmente como defensor central a lo largo de su carrera. Nació el 8 de junio de 1984 en San Lorenzo, Argentina. Es ampliamente reconocido por su dedicación, liderazgo en el campo y su habilidad para recuperar balones.
Mascherano comenzó su carrera profesional en Argentina, jugando para el club River Plate. Luego se trasladó al fútbol europeo, donde jugó en equipos como el West Ham United, Liverpool y Barcelona. Con el Barcelona, ganó numerosos títulos, incluidas varias Ligas de Campeones de la UEFA y títulos de La Liga. En el Barcelona, también se adaptó y se destacó en la posición de defensor central.
Además de su éxito a nivel de clubes, Mascherano fue un pilar en la selección argentina durante muchos años, participando en varias Copas del Mundo y Copas América. Su agresividad en la recuperación de balones y su capacidad para leer el juego lo convirtieron en un jugador crucial para el equipo nacional.